Cíclicamente se discute la situación de la niñez y la adolescencia en la República Argentina en cuanto objeto de las políticas sociales. El asunto aparece ligado a las problemáticas de la seguridad (personal) confundiéndose en ocasiones la frontera que divide a ésta del funcionamiento la Justicia y los instrumentos normativos. Se tiende a creer que la sanción en sí misma rehabilita, reduciendo la problemática de la intervención transformadora al denominado "garantismo penal" pero sin incluir con idéntica fuerza las garantías substanciales con rango constitucional, es decir los Derechos Humanos expresados en diversos convenios que el país ha firmado.