BIBLIOGRAFIA Y CONGRESOS el uso y la administracion de la creacion, asi como un indicio de la aprobacion divina en la consecucton exitosa de tal empresa. Con todo, es menester observar que las ulteriores manifestaciones del capitalismo, a menudo extremaron ciertos aspectos inherentes a la concepcion protestante de la vida practica, desproveyéndola de su mspiracion fuertemente ético-religiosa, bajo la cual, la produccién y el aumento de riquezas, nunca podrian ser un fin en si mismos. Destaca, sin embargo Daros, que, pese a la relatividad de algunas afirmaciones weberianas, el socidlogo aleman tuvo el mérito de traer a luz la discusion sobre ciertos factores influyentes en la economia que no son solo materiales, sino de otra indole. Ponia asi en evidencia, de un modo no unilateral, la complejidad de los fendmenos sociales. Atribuirle a algunas doctrinas protestantes una incidencia sobre el surgimiento del capitalismo no significa, sin embargo, afirmar que sea su unica causa. En tal sentido, el autor aporta multiples opiniones acerca de que tal mentalidad podria encontrarse larvada ya en los mercaderes de la Edad Media, e incluso, el capitalismo como tal, reconoceria causas que nada tienen que ver con la Reforma. Asi, por ejemplo, en Lutero, la vida se rige por la justicia, de modo que resulta inconcebible una separacion de la esfera econdmica y social con respecto a Dios. Tal escision entre la moral y el trabajo no se debe a la ética protestante, sino a un proceso de secularizacion y prescindencia de Dios que aparecera en la época moderna. Quizas algo mas patente sea el vinculo entre el capitalismo y el calvinismo, pues para el reformador francés el éxito en la vida terrenal fue visto como un signo de la salvacion obrada y preelegida por Dios. El éxito en el trabajo tomaba ahora un mmpulso interno y se convertia en un signo de la predestinacion divina. El individuo tomaba conciencia del mandato biblico de multiplicar los talentos y volcaba todos sus esfuerzos en la producciéon de bienes y riquezas destinados a ser compartidos con sus semejantes. “Sin esta tendencia impulstva al trabajo exitoso, no se habria desarrollado luego el capitalismo. El dinero fue validado, aunque debia ser pensado y administrado dentro de una vida ascética” (33). Segun Daros, Calvino percibia el nuevo clima social y econémico que se estaba viviendo en su tiempo. Por ello, fue mas tolerante para con el uso del dinero y el cobro de intereses; mas todo ello debia tener un limite moral. Por su parte, el metodista John Wesley, st bien exhorto al trabajo mtensivo y al ahorro, impuso también una impronta fuertemente ética al mismo: “Gana todo lo que puedas, ahorra todo lo que puedas, da todo lo que puedas”. Al 160 Enfoques XVIII, 1-2 (2006)